Radio de ayer y de hoy, presenta...

09.11.2008 23:07

 “¡Los caminos que conducen a la mente pasan también por los oídos!

La radio es, ante todo, arte de expresión.”

Romeo Figueroa

 

Una de las industrias electrónicas y culturales más antiguas es la radiofónica. Logra una gran penetración en los ámbitos público y comercial, y en diferentes mercados como el nacional, regional y local. A pesar de la competencia con otros sistemas de difusión, la radio, en la mayoría de países, incrementa el número de oyentes.

Es difícil establecer un solo inventor  y una fecha exacta para el surgimiento de la radio. Sin embargo, en 1912 se remonta el comienzo  de la radiodifusión, a raíz de la expansión de señales radiales provenientes del transporte marítimo y de las estaciones terrestres de comunicación. El 12 de abril de ese año, David Sarnoff, ingeniero y pionero de las retransmisiones radiotelevisivas, se mantiene en contacto durante tres días con el radiotelegrafista del Titanic hasta que éste se va a pique, a la vez que retransmite a los receptores lo que ocurre.

Actualmente la industria radiofónica está madura. Su trayectoria le garantiza estabilidad frente al desarrollo tecnológico. En ese sentido hay mayores posibilidades de producción, “lo que falta son creadores y generar una necesidad en el medio, que posibilite un uso adecuado de la tecnología”, asegura Carlos González, programador de la emisora Universidad de Antioquia.

Los aparatos para reproducir ondas sonoras entran por Barranquilla aproximadamente en 1928, con lo cual se dan los inicios de la radiodifusión colombiana. Así la radio se constituye como medio de distracción. No obstante, se crea la necesidad de transmitir noticias y se hace con la lectura de los diarios impresos. De esta manera se crea un equilibrio entre el entretenimiento y lo informativo.

Los noticieros que se hacen en la radio de hoy, según Carlos González, no son tan elaborados en el sentido que no profundizan en la información para elaborar géneros como la crónica y el reportaje, “se limitan a hacer las empanadas para el día”. Para Francisco Velásquez, periodista y profesor jubilado de la U de A,”al periodista le castraron la capacidad investigativa y lo tienen sometido al domesticamiento”. Recuerda que anteriormente la radio en el campo periodístico se hacía con gran recursividad del reportero.

Antiguamente en Colombia la radio tenía una ventaja porque grandes artistas y creadores trabajaban en ella. En ese entonces había que usar más la imaginación para hacer programas radiales”. La radionovela es uno de los géneros más importantes del pasado. Francisco afirma que es una caracterización maravillosa que evoca el concepto de magia.

Auditorios, equipo escénico y orquestas son algunas de las características para la realización de las radionovelas. Carlos comenta que tenían la facilidad para expresarse con mucha calidad, en el sentido en que el libretista tenía la capacidad de escribir para la radio; entonces se creó una industria que duró muchos años “fue la edad de oro en cuanto a creación”.

 

NOSTALGÍA DE LA RADIONOVELA

“En ella se trataba el imaginario de valores que el país tenía en ese momento”. Los actores y los libretistas se esforzaban cada día por hacer bien su trabajo. Los radioescuchas tenían un ritual diario antes de la radionovela: todos los oficios se hacían antes para no interrumpir, las baterías del receptor debían probarse regularmente y eran parte indispensable de la canasta familiar. En medio de los relatos no se podía hablar, los comentarios se hacían durante comerciales y luego de cada capítulo la familia conversaba a cerca de lo que podría pasar en el siguiente. [1]

La cadena radial Todelar, intenta recuperar la radionovela pero fracasa. (Consultar fecha) Con los efectos que se ingeniaban para la radiodifusión, lo introducían a uno en una selva y uno iba imaginando”. La radio es muy importante porque aún permite que las personas imaginen e interpreten lo que se dice en ella. Ahora con las telenovelas todo lo muestran “hasta se exceden en lo que muestran”, dice Francisco. 

Cuando se valora la expresividad, la palabra hablada adquiere verdadero sentido. Se pretende que ésta haga vibrar la capacidad perceptiva de los sentidos para que adquiera el significado como expresión. “…No se pierda el próximo capítulo, a esta misma hora y en esta emisora”. (Kalimán)*

 

¿LA TECNOLOGÍA ADORMILA LA CREATIVIDAD?

“Cuando yo empecé en la radio no había tanta tecnología, los programas eran mucho mejores porque la gente leía y se preparaba más”, asegura Dony Miranda, periodista y locutor de la W radio.  Por su parte Diego Echeverri, Director del programa Línea positiva de Caracol radio, dice que la creatividad no se acaba, pero muchos medios de comunicación entran a ser facilitas porque la parte comercial es más importante que los contenidos y está por encima de ellos.

El Jefe de la emisora Cámara de Comercio de Medellín, Javier Rodríguez, dice que la tecnología sí influye en la forma de hacer y producir radio. “Mi idea de la radio comercial es que ha sido mala siempre, muy facilista, carente de imaginación, muy conformista, que no explora nuevos esquemas ni nuevos formatos”. Por esas razones, desde su trabajo en la emisora hace la “antítesis” de todo. Por ejemplo, no hace rifas porque generan un radioescucha irreal, que sólo oye la emisora por lo que le van a regalar.

Lo que les interesa a ellos es que la gente de Medellín tenga acceso a música diferente, les preocupa que los mensajes que emiten sean claros y contundentes en cuanto a investigación y producción, “no tenemos afanes de competir contra nadie, por eso tenemos la libertad de presentar una música completamente diferente a las demás estaciones”.

Dony dice que en épocas anteriores el periodista utilizaba el 90% del cerebro y el otro 10% era donde lo dejaba grabado, bien sea una máquina de escribir o un estudio de grabación. Hoy se le deja a las herramientas el 90% y el restante lo dejan para sus facultades.  “No hay si no que comprar la música, un buen equipo, un buen programador y tener un buen animador”, añade Carlos González.

Yo creo que la cuestión no es tanto en la tecnología, antes empatábamos dos pedazos de cinta y ahora se hace un empate en la pantalla con un mouse”. Para Javier, la cuestión está en que la radio viene degenerándose, siendo cada vez más pobre y menos imaginativa. Complementa que es porque los directores de emisora son gente con poca preparación y bagaje intelectual. Creen que con tener buena voz y timbre, y ser animado al aire basta.

 

LAS NUEVAS PROPUESTAS

Los programas de hoy difieren de los de antes porque la música es casi todo su contenido. “Mientras más uno hable menos sintonía tiene”. En FM casi todos son musicales y con poca elaboración. Anteriormente las personas que hacían radio eran periodistas o personas preparadas que sentían un fervor por ella. Los programas eran productivos y educativos “daban de todo, un paquete muy bueno”, dice Dony Miranda. 

Llega un momento en que la radio se vuelve el canal preferido para difundir la música, lo que hace que se convierta en un medio más facilista. Sin embargo, las personas saben cada vez menos de ésta porque en las emisoras pasan hasta siete veces la misma canción por día. “Son absurdos los mensajes de la música, no es que las canciones tengan que ser un tratado para uno aprender algo, pero no hay nada”, asegura Javier Rodríguez.

Para Carlos la radio sufre un decaimiento en cuanto a contenidos. Por el lado de los medios universitarios y de las nuevas generaciones de periodistas, puede que surjan nuevas opciones, así como aparecen nuevas revistas, documentales y periódicos; “en eso la radio universitaria está haciendo un papel interesante para la historia”. Un ejemplo de ello es lo que hace la emisora U de A, que fundamenta su programación en educación, información y cultura.

En Medellín, emisoras, como La Cámara de Comercio, Universidad Pontificia Bolivariana, Radio Unal, entre otras, realizan una labor interesante para fortalecer y mantener vigente la importancia de la radio como medio de información y distracción.

 

“Llegará un día en que un hombre te hablará a miles de kilómetros de distancia,

y tu tranquilamente le podrás escuchar donde estés, más no le podrás ver por estar tan lejos."

Quinta profecía Maya.


 La Radio.doc (42,5 kB) 

 Claudia Patricia Arboleda Ortiz

Catalina Pérez Galeano

 

Volver

Sitio de búsqueda

Medellín Colombia © 2008 Todos los derechos reservados.